Según el Departamento de Estadísticas e Información de Salud, en Chile la mayor causa de fallecimientos es por enfermedades cardiovasculares (ECV), las que con cambios de estilo de vida pueden ser prevenibles.
Agosto es el mes del corazón, instancia que busca promover los hábitos saludables y concientizar a la ciudadanía sobre las afecciones que pueden afectar a este importante órgano de nuestro cuerpo.
Por esta razón, nuestros cardiólogos de IntegraMédica han querido entregarte una serie de acciones que puedes realizar en el día a día y que te ayudarán a disminuir las posibilidades de contraer un ECV.
Se denominan enfermedades cardiovasculares al grupo de padecimientos que afectan al corazón como a los vasos sanguíneos, generalmente causadas por la acumulación de grasa y colesterol en las paredes de las arterias.
Dentro de estas enfermedades más frecuentes se encuentran la hipertensión, cardiopatías coronarias, los infartos, la insuficiencia cardíaca, arritmias y los accidentes cerebro vasculares (ACV).
Todas ellas, enfermedades cardiovasculares prevenibles con consultas frecuentes al médico, exámenes de rutina que puedes hacer en nuestros laboratorios y modificaciones alimentarias como de conducta que beneficien tu bienestar integral.
Hay que considerar que existen factores de riesgo que no son controlables respecto de las predisposiciones a algunas enfermedades, como la edad, el sexo y los antecedentes familiares.
Sin embargo, existen otros factores que sí son controlables y hay acciones que podemos poner en práctica para tratar de evitar o disminuir los riesgos de estas patologías cardíacas.
Este tipo de patologías suelen desarrollarse con el tiempo, aunque muchas veces puedan parecer invisibles, lo cierto es que existen distintos síntomas que advierten la presencia de un mal funcionamiento cardiovascular.
Conocer estas señales es imprescindible para actuar a tiempo y prevenir los padecimientos que te mencionamos anteriormente. Algunos de los síntomas que puedes encontrar son:
Este es uno de los síntomas más comunes en cuanto al mal funcionamiento del flujo sanguíneo que llega al corazón. Se expresa como una molestia que se percibe en el tórax izquierdo, incluyendo el cuello, la parte superior del abdomen e incluso el brazo izquierdo.
Si bien suele asociarse la intensidad del dolor con la gravedad del problema, dependerá de cada persona como lo nota. En general es un dolor intenso, la mayoría de las veces asociado a esfuerzos físicos pero también puede suceder en reposo, de carácter punzante, mientras que para otros llega a ser agobiante. Es importante destacar que el dolor tiende a ceder con el reposo.
En el caso de las insuficiencias cardíacas sucede que el corazón no es capaz de bombear sangre de forma correcta.
Dado esto, a las personas se les dificulta respirar con normalidad en situaciones en las que se está llevando a cabo una actividad, mientras se descansa o cuando se acuesta de espalda.
Como el funcionamiento del corazón no está al 100%, el flujo de la sangre se torna más lento, causando que el fluido se concentre en los tejidos y genere un aumento de volumen blando que llamamos edemas.
Esta inflamación es posible identificarla en la parte inferior del cuerpo, tanto en piernas, tobillos y pies, en general cede cuando la persona reposa con las extremidades en alto.
Tal como mencionamos anteriormente, puesto que el corazón no se encuentra en su óptimo funcionamiento, este muchas veces puede presentar arritmias que son alteraciones del ritmo normal.
Es allí cuando con el objetivo de tratar de mantener el ritmo cardíaco normal este dará latidos más rápidos, haciendo que sientas palpitaciones veloces o como si golpearan dentro de tu pecho.
Es importante que si presentas algunos de los síntomas descritos por nuestros especialistas, consultes inmediatamente para efectuar una detección temprana y puedas evitar las consecuencias de las enfermedades cardiovasculares.
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