Has notado que tu piel está tensa, presenta líneas agrietadas, se siente áspera, generando picazón y enrojecimiento de zonas como la cara. Bueno, si tienes alguna de estas características es probable que tengas piel seca.
La piel seca es frecuente en la temporada invernal, dado que las bajas temperaturas actúan en tu dermis, sin embargo, esta condición puede permanecer más que en el periodo estacional. Por ello, junto al equipo de dermatología de IntegraMédica queremos entregarte los mejores consejos para cuidar y tratar la piel seca.
Nuestros médicos especialistas describieron los 5 tipos más comunes de pieles. Lee el siguiente artículo para que descubras cuál tienes tú.
Aquellas personas que tienen piel seca su producción de sebo es menor a lo que se considera el rango normal, haciendo que se sienta más áspera y tensa. La situación se produce porque las glándulas sebáceas no segregan la cantidad necesaria de lípidos, entonces, estos no son capaces de retener la humedad.
Entre los signos que puedes evidenciar en tu dermis, si estás presentando piel seca, es la descamación de la misma, podrás sentir inflamación y cierto dolor; además, en partes como las piernas, las podrás ver con aspecto agrietado.
Dentro de las causas más comunes para desarrollar este tipo de piel está la actuación de los agentes externos que se encuentran en el ambiente, siendo muchos de ellos totalmente controlables por los pacientes para mejorar la salud de su piel. Aquí se encuentran algunos a los que debes evitar y ponerle atención.
Calefacción
Las estufas a leña, los calefactores y cualquier tipo de calefacción dentro de espacios cerrados disminuye la humedad.
Jabones y detergentes
Algunos de estos elementos son formulados para eliminar la humedad y terminan siendo perjudiciales.
Duchas calientes
Tomar baños por mucho tiempo y en temperaturas muy altas resecan tu dermis.
Afecciones
Personas con ciertas patologías como la dermatitis atópica son propensas a desarrollar este tipo de piel.
El aspecto más importante del cuidado es mantener la piel hidratada, lo que garantizará su protección natural para efectuar una renovación celular efectiva, aseveran nuestros dermatólogos. Acciones como la ingesta permanente de líquidos y el buen dormir son fundamentales en este sentido, pero ¿qué otras cosas puedes hacer?
Un jabón cualquiera puede remover de forma excesiva la capa de grasa más externa de tu piel, lo que en definitiva la debilitará. Para evitar esto, se recomienda que ocupes jabones hidratantes, especialmente jabones líquidos neutros, los que aportarán hidratación a tu piel y disminuirán la resequedad.
Los especialistas indican que las cremas hidratantes reponen los nutrientes y la oleosidad que la piel seca necesita para adquirir nuevamente humedad. Con tal condición, adhieren que debes utilizar una específica para cada parte del cuerpo, cara, cuerpo, manos y pies. Siendo su uso diario para obtener los efectos deseados.
Tal como te hemos contado en artículos anteriores , el beber líquidos es la mayor fuente de hidratación para la piel y todo tu organismo. Consumir agua en su estado puro, a lo menos entre 2 a 3 litros por día, asegura un buen funcionamiento de tu cuerpo e influirá positivamente en la salud de tu piel.
Personas con altos niveles de estrés mantienen un aumento del cortisol, hormona que afecta en la renovación celular de la piel. Por ende, una excelente forma de combatirlo es que puedas encontrar espacios de dispersión dentro de tu jornada. La práctica de deportes, actividades al aire libre o hacer algún hobby te ayudará en este aspecto.
Si quieres saber cómo puedes cuidar de mejor manera tu piel o identificar cuál tipo tienes, te invitamos a reservar una hora con nuestros dermatólogos, quienes te otorgarán las orientaciones necesarias para cuidar de tu salud dermatológica.
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