Fecha de publicación:
2 de Febrero de 2024Durante el verano, el calor añade un desafío extra para quienes buscan mantener su condición física. Una de las principales incomodidades experimentadas es el cansancio muscular, motivo por el cual es crucial comprender qué es la fatiga muscular.
Esta patología se presenta como un obstáculo común, afectando el rendimiento y la motivación de los deportistas. Sin embargo, al adoptar precauciones adecuadas y aplicar estrategias efectivas es completamente viable mantener un nivel óptimo de actividad física durante la temporada estival.
En este contexto, los especialistas en traumatología de Integramédica serán nuestros guías, brindándonos una comprensión profunda de cómo el calor estival afecta la fatiga muscular y ofreciendo estrategias clave para superar estos desafíos, permitiendo así mantener un estilo de vida activo y saludable.
Hay que tener en cuenta ciertas condiciones al momento de empezar hacer deporte, según nuestros especialistas para poder prevenir un malestar muscular debemos tener en cuenta al menos estas 3 causas de la fatiga.
Es uno de los motivos primordiales, ya que las elevadas temperaturas incitan a una mayor transpiración, ocasionando la pérdida de electrolitos.
Este fenómeno conduce a un deterioro del rendimiento muscular e intensifica la percepción de fatiga.
La exposición prolongada al sol afecta la regulación de la temperatura corporal, generando una sobrecarga en el sistema cardiovascular y muscular, lo que puede resultar en una mayor fatiga.
Para una persona que está recién comenzando en el mundo del deporte este tipo de clima le puede afectar el doble, causando más rápido una debilidad en el cuerpo y mucho cansancio
Al momento de hacer alguna actividad física ten en cuenta estos tips para prevenir un desgaste o cansancio muscular por el ejercicio
| Hidratación adecuada | Mantenerse bien hidratado es la clave en este proceso. Se aconseja tomar al menos 2 litros de agua al día, regula en dosis para antes, durante y después del ejercicio. |
| Protección solar | Estar protegido de los rayos UV es primordial y no solo para el cuidado de tu piel, si no para prevenir una insolación. Debes mantener una temperatura corporal en niveles seguros y así evitar un estrés muscular. |
| Alimentación balanceada | Si quieres que tus músculos resistan una jornada de entrenamiento en esta época de calor complementa tu dieta con alguno de estos alimentos: Los frutos secos y semillas, por sus grasas omega 3 de origen vegetal, como el ácido linolénico. La avena por su alto contenido de fibra. Verduras como la palta y el tomate disminuyen la cantidad de ácido láctico, uno de los responsables de la fatiga muscular. Una de las frutas que más se recomienda son los plátanos, este es super rico en fibra y potasio. |
| Equipamiento y ropa técnica | Es ideal tener en cuenta los implementos que debes usar al momento de salir a ejercitarse. Opta por tejidos transpirables y accesorios como gorras y gafas de sol para mantenerte fresco y reducir el riesgo de agotamiento por calor. |
| Planificación del entrenamiento | Organiza tu rutina de entrenamiento durante las horas más frescas del día, como la mañana o el atardecer, para evitar las altas temperaturas. Ajusta gradualmente la intensidad y duración del ejercicio para que tu cuerpo se adapte al estrés térmico, reduciendo la fatiga muscular |
| Post-entrenamiento | Después de completar tu rutina, es crucial realizar ciertos estiramientos para aliviar la tensión muscular. Además, se recomienda que, al tomar una ducha, optes por agua fría para relajar el cuerpo, especialmente los muslos, así existirá una gran probabilidad de evitar una fatiga muscular en las piernas. |
Si la falta de energía y la fatiga muscular persiste, no dudes en consultar a un traumatólogo. Estos especialistas pueden proporcionar evaluaciones precisas y soluciones personalizadas para garantizar que aproveches al máximo tus entrenamientos de verano sin sacrificar la salud musculoesquelética.
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